Con motivo de las ferias, festivales anuales en España, tienen lugar las corridas de toros que caracterizan las fiestas. Sin embargo, estas corridas de toros están viviendo actualmente un punto de inflexión, en relación con la crisis financiera.
España: ¿el fin de las corridas de toros?
Las corridas de toros tampoco son inmunes a la crisis financiera. Actualmente están experimentando una disminución en su éxito.
Sesenta y un municipios de Cataluña ya abolieron la tauromaquia durante veinte años, con Barcelona en la lista, que se declaró antitaurina en 2006. Por tanto, Barcelona ya no es tierra de corridas de toros.
La abolición total de las corridas de toros aún no está prevista, pero el Parlamento catalán debería debatir pronto la prohibición en el territorio catalán de las corridas de toros que implican una matanza. Una petición con más de 120 firmas de ligas de derechos de los animales ha acelerado la demanda de la prohibición.
Por ello, el icono taurino José Tomas decidió actuar en Barcelona de forma gratuita para defender a los aficionados, es decir, a los amantes del toreo. Esto se hará en detrimento de la feria de Sevilla, que por tanto no tendrá la oportunidad de ver a José Tomas este año.
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Las corridas de toros también enfrentan dificultades presupuestarias y subsidios públicos insuficientes de los municipios. En el contexto de la crisis financiera, estos han tenido que restringir sus presupuestos, con la supresión de ciertas corridas como resultado.
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Y al otro lado de la Tierra, ¿qué está pasando?
En la tierra de la calma matutina en Corea del Sur, a diferencia de las corridas de toros en España, las corridas son sin matadores y principalmente entre toros. La lucha puede durar desde unos minutos hasta horas enteras dependiendo de cada torneo. Un toro es declarado ganador cuando su oponente abandona el campo, pero ambos sobreviven a su enfrentamiento.
Estas peleas, bastante populares en el campo, han experimentado un cierto declive en las últimas décadas con el auge de deportes internacionales como el fútbol o el béisbol.
Por lo tanto, el gobierno de Corea del Sur quiere revivir esta tradición popular y legalizar las apuestas en las corridas de toros para julio de 2009.
Los animales ocupan un lugar importante en el corazón de los habitantes, lo que explica el ambiente espectacular de cada pelea. De hecho, animadoras y músicos con sus tambores y gongs animan el ambiente y muestran su apoyo a las estrellas de la arena.
Fuentes: The New York Times, El Mundo
